El Sistema Arrecifal Veracruzano (SAV) está ubicado frente a las costas de los municipios de Veracruz, Boca del Río y Alvarado.  Está integrado por 28 formaciones arrecifales, cayos e islas y representa el sistema arrecifal de mayor tamaño de la región centro del Golfo de México, el cual es hogar de varias especies protegidas.  Además de su alto valor ecológico, desde el punto de vista social es de gran relevancia para la realización de actividades pesqueras, de buceo deportivo y turismo de playa.  Se estima que el valor económico de los servicios ambientales que presta asciende a más de 290 millones de dólares.

En México, los arrecifes de coral ocupan un área de cerca de mil 780 km2, es decir, cerca del 0.63% del área total de este tipo de arrecifes en el mundo.  Su diversidad es comparable sólo a la de las selvas tropicales y los bosques de niebla.  Su gran valor ambiental radica en que son lugares de crianza, refugio, alimentación y reproducción de muchas especies, principalmente de carácter comercial.  De hecho, se estima que alrededor de 10% de la producción mundial de proteína para la alimentación humana proviene de estos ecosistemas.  Proveen también servicios ambientales fundamentales, tales como prevenir la erosión de la costa y disminuir la fuerza del oleaje, permitiendo la realización de actividades productivas de alto valor económico para la región como el buceo, el snorkel y el turismo en general.  Adicionalmente, constituyen la estructura de protección más efectiva contra tormentas tropicales y huracanes.

A pesar de su importancia, los arrecifes son afectados por diversas actividades humanas. Históricamente –desde la llegada de Hernán Cortés a México en 1519 y la fundación de la ciudad y el Puerto de Veracruz- el SAV ha sido fuertemente impactado, mostrando, sin embargo, una gran resiliencia.  Para protegerlo, en 1992 se creó el Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano (PNSAV).  En 1998 fue considerado dentro del Programa de Regiones Prioritarias para la Conservación de la Biodiversidad, en 2004 fue inscrito en la lista Ramsar de Humedales de Importancia Prioritaria Internacional y, finalmente, en 2006 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés), incorporó al PNSAV como Reserva de la Biósfera.

Derivado del proyecto de ampliación del Puerto de Veracruz, la poligonal del Área Natural Protegida (ANP) ha sido modificada, poniendo en riesgo zonas y ecosistemas muy relevantes.  Lo anterior se ve agravado por el hecho de que el PNSAV carece de programa de manejo que ordene las actividades que pueden realizarse en la zona.

Recientemente, investigadores de la Universidad Veracruzana (UV) y el CEMDA dieron a conocer el hallazgo de un gran Corredor Arrecifal en el Suroeste del Golfo de México (CASGM). Los arrecifes descubiertos se caracterizan como bordeantes y sumergidos, y están ubicados en regiones aledañas al Sistema Arrecifal Veracruzano (SAV), frente a la costa de los municipios de Úrsulo Galván, Actopan, La Antigua, Veracruz, Boca del Río y Alvarado, denominándose Arrecifes Intermedios Centrales (AIC).  Por esta razón, más que nunca debemos seguir insistiendo para que el gobierno federal, -particularmente la Comisión Nacional para Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp)- brinden mayor protección a estos ecosistemas, frente a las amenazas que representan la actividad pesquera no regulada, la extracción petrolera y el proyecto de ampliación del Puerto de Veracruz.

Recordemos que las ANP son un instrumento de política ambiental concebido para la conservación de los ecosistemas y de la biodiversidad del país, cuya finalidad última es la satisfacción de diferentes derechos humanos, muy particularmente el derecho al medio ambiente sano.