El Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. (CEMDA) hace un respetuoso llamado al poder Judicial de la Federación para que realice una valoración integral del caso relacionado con la construcción del Puente vehicular Periférico Sur y Canal Nacional en la Alcaldía Xochimilco, dadas las irregularidades en que se ha incurrido en la construcción de la obra, así como para que priorice en sus criterios de decisión el alto valor ambiental y cultural de la zona.

Hasta el momento, tanto el juzgado de la CDMX, como el Tribunal Colegiado de Circuito han considerado que la construcción de un puente vehicular contribuye de mejor manera a garantizar el derecho humano a un medio ambiente sano de la población que el ecosistema de humedal cuyo valor ambiental ha sido reconocido a nivel internacional y el cual se encuentra en riesgo de ser severamente afectado por las citadas obras.

En sus resoluciones, han ignorado que en Xochimilco se encuentra un Área Natural Protegida (ANP), así como un sitio RAMSAR, catalogado así por constituir un humedal de importancia internacional, además de que el sitio ha sido declarado Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad.

Cabe recordar que el 27 de julio del 2020, el CEMDA, en representación de integrantes del colectivo Xochimilco Vivo, interpuso una demanda de amparo para la defensa del humedal y Área Natural Protegida de Xochimilco.

La experiencia nacional e internacional han demostrado que la construcción de nuevas vías para los automóviles NO constituye una forma efectiva de mejorar la movilidad ni la calidad de vida de las personas, toda vez que en el mediano plazo induce a un mayor tráfico vehicular y, por ende, genera un mayor número de emisiones contaminantes a la atmósfera. En contraste, entre los servicios ambientales que brindan los humedales se encuentran: controlar inundaciones, reponer aguas subterráneas, proteger contra tormentas, retener sedimentos y nutrientes, depurar aguas, alojar especies acuáticas y contribuir a su reproducción, capturar carbono, contribuyendo con ello a la mitigación y adaptación al cambio climático; mantener la biodiversidad, así como proporcionar belleza escénica que incentiva el turismo. No es casualidad que las civilizaciones humanas se hayan concentrado desde hace miles de años a las orillas de valles fluviales y llanuras costeras donde abundan los humedales.