• Alertan que el destino ya se encuentra saturado y generaría daños potencialmente irreversibles al Sistema Arrecifal Mesoamericano.
  • Destacan que los ingresos provenientes de los cruceros no generan los beneficios esperados para la región ni para la comunidad.

Organizaciones de la sociedad civil, académicos y personas vinculadas con la defensa del medio ambiente, pidieron a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) llevar a cabo una reunión pública de información sobre el proyecto «Terminal marítima banco playa» promovido por la Administración Portuaria Integral (API) de Quintana Roo, con la finalidad de conocer más elementos sobre el proyecto, detalles sobre la construcción, el estudio realizado en la zona, los impactos previstos, así como las medidas para mitigarlos.

Este grupo intersectorial hace un llamado a la Semarnat para que no se autoricen más obras de este tipo dado que es un destino que ya se encuentra saturado y nueva infraestructura afectaría de forma grave las playas, los arrecifes, los ecosistemas, la calidad de vida de los habitantes de la región, así como del destino turístico.

Cabe resaltar que recientemente, la API de Quintana Roo anunció la licitación de un cuarto muelle para cruceros para cuatro posiciones al norte en la explanada del Puerto de Abrigo conocida como Banco Playa, con una inversión estimada de 40 millones de dólares. Dado que estas obras pueden generar desequilibrios ecológicos graves, así como daños a los ecosistemas, se justifica la realización de una reunión púbica de información, de conformidad con lo que establece la legislación ambiental[1].

La isla de Cozumel, en el estado de Quintana Roo, tiene una extensión de 45 kilómetros y sus ingresos provienen principalmente de la actividad turística. Es el segundo puerto de arribo de cruceros en el mundo, recibiendo 3.4 millones de visitantes por esta vía al año. Sin embargo, por su condición de aislamiento, su sistema ambiental es muy vulnerable. Originalmente era una villa de agricultores que se convirtió en destino turístico por excelencia para los amantes del buceo, debido a que es parte de la segunda barrera coralina más grande del mundo, el Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM), el cual abarca desde Quintana Roo, México hasta Honduras.

El SAM comprende 60 áreas naturales protegidas (ANP) que proveen hábitats críticos para la alimentación, anidación, crianza, desove y reproducción de un elevado número de especies de flora y fauna de importancia comercial, amenazadas o en peligro de extinción. Es uno de los ecosistemas con mayor riqueza en biodiversidad, con más de tres mil especies marinas reportadas. Adicionalmente, constituye una barrera fundamental contra huracanes y tiene una gran importancia por la actividad económica y comercial que detona, por el patrimonio cultural submarino que alberga y por su valor para la investigación. El sistema de arrecifes de coral de la zona ha requerido de miles de años para formarse y, en caso de sufrir daños, podría no regenerarse. Entre las principales amenazas para este frágil ecosistema figura el daño físico por encallamiento a causa del incremento en la intensidad del tráfico marítimo como resultado del traslado de mercancías y pasajeros[2].

De acuerdo con la Iniciativa Arrecifes Saludables (Healthy Reefs Initiative), la puntuación general del Índice de Salud Arrecifal del SAM 2015 fue «regular», con una calificación de 2.8 en una escala que va del nivel 1 -considerado crítico– al nivel 5 -considerado muy bien. A nivel de sitio, 34% de los arrecifes se encontraron en estado regular; 40% en mal estado y 17% en estado crítico[3]. En lo que respecta específicamente a Cozumel, la calificación otorgada a la salud del arrecife es de 3.5.

Al respecto, los promotores de la reunión púbica de información resaltaron que se requiere elaborar un estudio técnico-científico detallado para determinar el efecto que tendría en las corrientes la barrera física que crearía el nuevo muelle y el tránsito de cruceros en esa zona al norponiente de la isla, debido a que ahí se desarrollan las larvas de caracol rosado (Strombus gigas), símbolo del estado[4] y que también es zona de reproducción cada invierno de las Rayas Aguila (Aetobatus narinari).

Indicaron que también podría ser afectado el depósito de arena ya que las playas de Quintana Roo son abiertas y hay un gran movimiento de sedimentos, como lo ha demostrado la pérdida de playas que ha afectado a destinos como Cancún, Playa del Carmen y Cozumel, al punto de que el gobierno federal ha tenido que implementar un programa de restauración de playas.

Adicionalmente, quienes se dedican a la actividad turística local han destacado que los ingresos provenientes de los cruceros no generan los beneficios esperados para la región ni para la comunidad. Refirieron que durante 2015, Cozumel recibió poco más de 600 mil turistas de pernocta (60% de ellos internacionales), cuya estancia promedia entre tres y cuatro días. Esto genera una derrama estimada en 520 millones de dólares. Los ingresos generados por los excursionistas de crucero ascendieron a 80 millones de dólares; es decir, apenas el 14% de la derrama total. Se calcula que, en promedio, un turista gasta 538 dólares durante su estancia, en tanto que un excursionista de cruceros solamente gasta 89 dólares[5].

Por todo lo anterior, los que suscriben este comunicado solicitan tanto a Semarnat como al gobierno del estado de Quintana Roose privilegie la conservación de uno de los ecosistemas más valiosos tanto de México, como de todo el planeta.
Para mayor información contactar:
Centro Mexicano de Derecho Ambiental
Margarita Campuzano
Ricardo Ruiz Esparza
Tel. Oficina 52863323
Móvil 5564227884

[1] Artículo 34, párrafo III de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA).

[2]Pedro-Luis Ardisson (et al). El Sistema Arrecifal Mesoamericano-México: consideraciones para su designación como Zona Marítima Especialmente Sensible. Hidrobiológica vol.21 no.3 México sep./dic. 2011, Disponible en línea: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S0188-88972011000300005&script=sci_arttext

[3] Arrecife Mesoamericano. Una evaluación de la salud del ecosistema. Reporte del estado de salud 2015. Disponible en línea: http://www.healthyreefs.org/cms/wp-content/uploads/2015/05/MAR-SP-small.pdf
[4] Se decretó una veda por 5 años (2012 al 2017) en la pesca de caracol rosado debido a que se encuentra en peligro de extinción. Las larvas actualmente llegan por la corriente desde la Bahía de Chetumal. (Fuente: Manuel Pérez. Distribución y abundancia de Strombus gigas en Yucatán, Revista de Biología Tropical, 2009).
[5] Organización Mundial de Turismo. Barómetro Mundial de Turismo, 2015