64 Organizaciones de la Sociedad Civil y 102 académicos, investigadores y ciudadanos firmantes de la carta adjunta, manifestamos a la Comisión Intersecretarial para la Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados y al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, órgano de la Secretaría de Agricultura, un enérgico rechazo a tal propuesta, -actualmente en revisión por parte de las autoridades mexicanas-, considerando la posibilidad de los graves riesgos para la salud humana y ambiental, así como las afectaciones devastadoras para la economía campesina que estas siembras representan.

 

A través de esta misiva, le recordamos a los funcionarios que el Juzgado Primero de Distrito de Mérida, Yucatán, dictó ya una suspensión de oficio para la siembra de 30 mil hectáreas de soya transgénica solicitada por Monsanto en el 2011, debido a los daños irreparables que puede ocasionar al medio ambiente y los riesgos que representa para su salud humana.