«Now, more than ever, we are a big, beautiful, unified movement. We are coming together around the world like never before to demand a brighter and more just future for everyone.»

Semanas antes del 21 de septiembre, diversas organizaciones sociales y civiles ya se preparaban para el gran día, y haciendo uso de las redes sociales, se dieron a la tarea de hacer un llamado mundial para salir a las calles y hacer uso del espacio público para unir las voces en un solo grito de “Justicia Climática” y “Acciones, no palabras”. El día llegó y según la organización Avaaz, más de 675,000 personas, en alrededor de 162 ciudades, salieron a las calles  y marcharon en franca exigencia para que los gobiernos tomen acciones urgentes y hagan frente a una responsabilidad inédita e impostergable: la lucha contra el cambio climático.

Por las calles marcharon personalidades de diversos ámbitos, desde Leonardo Di Caprio, pasando por Sting, hasta llegar a Jane Goodall y Al Gore.  No faltó  Ban Ki-Moon, Secretario General de la ONU, quien afirmó que “para luchar contra el cambio climático no hay un plan B, porque no hay un planeta B. El planeta es uno solo”.

La organización Avaaz entregó al Secretario General de la ONU una petición en nombre de millones de ciudadanos que exige a nuestros líderes un “acuerdo realista a escala global, nacional y local que convierta nuestras sociedades y nuestras economías en 100% limpias para el año 2050.”

“Nuestro objetivo principal en el fortalecimiento de las marchas como la que tuvimos el 21 de septiembre no es para atacar las negociaciones climáticas de la ONU, sino para construir un movimiento que sea lo suficientemente fuerte como para desafiar y cambiar el sistema capitalista. La principal lección de esta semana es que tenemos que hacer movilizaciones permanentes aún más fuertes y con mensajes muchos más claros dirigidos a los principales contaminadores, que son las grandes corporaciones.»

Pablo Solón.  Ex embajador de Bolivia ante la ONU y Director Ejecutivo de Ficus on the Global South.

“Las alarmas siguen sonando, nuestros ciudadanos siguen protestando, y no podemos fingir que no les escuchamos. Tenemos que responder a su llamada.”

Barack Obama

Paula Fuentes de GFLAC presente en la Marcha de Londres

Sandra Guzmán de GFLAC presente en la Marcha de Nueva York

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Dos días después de la Movilización Climática de los Pueblos, El Secretario General de la ONU Ban Ki-Moon, invitó a 100 jefes de Estado, 800 líderes de negocios y a 38 miembros de la sociedad civil, a que asistieran a la Cumbre del Clima, celebrada el 23 de septiembre en Nueva York. En esta Cumbre, el Secretario General hizo un llamado a un firme compromiso para tomar medidas urgentes en determinadas áreas críticas,  para evitar que la temperatura global suba más de dos grados centígrados, a partir de 8 áreas específicas de acción. A continuación expondremos brevemente los planes de acción propuestos por la ONU para cada una de las áreas.

Las Naciones Unidas, las organizaciones de la sociedad civil, los pueblos indígenas y el sector privado están colaborando en una iniciativa mundial para hacer frente a la deforestación y ampliar la repoblación de los bosques. Esta iniciativa incluye una alianza público-privada para erradicar la deforestación en las cadenas de suministro de productos básicos agrícolas y la creación de grandes incentivos para recompensar la reducción de emisiones en los países de bosques tropicales.

Los gobiernos, las empresas y asociaciones de transporte, otros actores del sector privado y las organizaciones de la sociedad civil tienen previstas medidas audaces para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas al transporte mediante un mayor uso del transporte público y del transporte por ferrocarril más eficiente, así como la introducción acelerada del transporte eléctrico urbano.

Al concluir la Cumbre del Clima, Ban Ki-Moon aseguró que las declaraciones y anuncios hechos durante la jornada, pusieron de manifiesto “una visión global y completa del cambio climático”.

«En el camino hacia Lima y París, el día de hoy quedará como el día en que la familia humana decidió ordenar su casa para hacerla sostenible, segura y próspera para las generaciones futuras. La Cumbre de hoy ha mostrado que podemos hacer frente al cambio climático»
Ban Ki-Moon 

• “Recientemente vivimos el peor invierno de nuestra historia, un verdadero desastre natural, millones de familias fueron afectadas y varios sectores claves de nuestra economía sufrieron severos daños. Hoy en día nos enfrentamos a una dura sequía, para la cual, afortunadamente, nos comenzamos a preparar desde el año pasado”.
• “Esperamos liderazgo y compromiso de todos los países, en particular de aquellos con mayores niveles de emisiones de gases de efecto invernadero”.

Enrique Peña Nieto
Presidente de México

• “Para México, la atención al cambio climático es un compromiso de Estado. Los seres humanos somos la causa del cambio climático, pero también podemos ser la solución”.
• «Vamos más allá de lo previsto en la ley respectiva al establecer una meta aún más audaz, que en 2018, 34.6 por ciento de la capacidad de generación de electricidad sea a partir de energías renovables y tecnologías limpias y con ello más de una cuarta parte de toda la energía eléctrica del país provenga de fuentes bajas en carbón».
• El Presidente Enrique Peña Nieto encabezó la Mesa Temática sobre Financiamiento de la Cumbre, en la que anunció que México hará una aportación de 10 millones de dólares al Fondo Verde para el Clima.

Dilma Rouseff
Presidenta de Brasil

• Brasil desea un acuerdo de Cambio Climático global propicio para el desarrollo sostenible, y un crecimiento de nuestras economías compatible con la reducción de emisiones. En Brasil, al mismo tiempo que trabajamos por reducir la pobreza y la desigualdad social, estamos protegiendo al medio ambiente y hemos obtenido resultados extraordinarios.”
• en los últimos años la deforestación en Brasil se ha reducido en un 79%», y que el país está cumpliendo con su compromiso de una reducción de entre «36 y 39% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2020»
• «En un mundo de injusticia ambiental los pobres son los más vulnerables»

• Los fenómenos extremos que acarrea el cambio climático tienen un impacto negativo en la economía y agudizan la pobreza.
• Las sequías han aumentado el desempleo y la pobreza, y han desbordado las posibilidades económicas de Honduras.
• “Por nuestros hijos y por los hijos de nuestros hijos, por nuestra humanidad, tenemos que afrontar este enorme desafío del cambio climático.”

• “Los países en desarrollo no podemos seguir subsidiando las emisiones de los países más contaminantes”.
• Hace falta solidaridad internacional para que los esfuerzos de países como Costa Rica detengan el avance del cambio climático.
• Costa Rica está comprometida con el desarrollo masivo de tecnologías renovables para uso doméstico y con la promoción de patrones de consumo energético, accesibles y adecuados. Sin los recursos suficientes no podrán concretarse las estrategias.
• Para lograr un acuerdo en la conferencia de París el año próximo será imperativo que haya compromiso, cooperación, equidad y transparencia.
• “Equidad para que tanto los responsables históricos como los grandes emisores asuman su cuota de responsabilidad en reducciones y provisión de medios de implementación para los cambios que necesitamos”.

Ollanta Humala
Presidente de Perú

• «Ha llegado el momento de movilizar la mayor alianza de la historia para el clima y el desarrollo. La alianza que se pone en marcha enfrenta importantes desafíos en un muy breve plazo”
• El nuevo acuerdo que se deberá adoptar en París el próximo año tendrá que ser justo y reconocer las diferencias de los países, además de ser equilibrado, equitativo y transformador de las fuentes energéticas.
• La construcción de consensos sobre esta materia constituye “la prueba más ardua, jamás enfrentada por el sistema multilateral de Naciones Unidas”.
• “En solo tres meses, la COP20 en Lima deberá efectuar avances concretos hacia la adopción, en diciembre del próximo año, de un nuevo acuerdo universal de naturaleza vinculante, fundado en los principios y disposiciones de la convención marco de la ONU para el Cambio Climático”.

Moisés Omar Halleslevens
Vicepresidente de Nicaragua

• Los países en desarrollo han hecho aportaciones más sustanciales a la reducción de gases nocivos que los países ricos, que mantienen modelos económicos altamente contaminantes.
• “Las causas estructurales de la crisis del clima residen en modelos políticos y económicos basados en patrones insostenibles de producción y consumo de los países desarrollados, que generan inequidad, injusticia, pobreza, hambre y exclusión social”
• Nicaragua es un ejemplo de mitigación voluntaria de las causas del cambio climático y ha ampliado y transformado su red energética. El 52% de su energía en 2013 proveía de fuentes renovables y para 2018 se prevé llegar al 74%.

• Chile asume el compromiso voluntario de reducir en un 20% sus emisiones para el 2020 dependiendo del apoyo que se reciba de la comunidad internacional.
• Se adoptó una reforma tributaria que incluye impuestos al exceso de emisiones de dióxido de carbono, medida pionera en América Latina y el Caribe.
• La agenda de energía “incluye la adopción de la eficiencia energética como política de Estado, así como el compromiso de que un 45% de la capacidad de generación eléctrica instalada de aquí al 2025 provenga de fuentes energéticas renovables no convencionales”.
• “Podríamos alcanzar un millón de hectáreas de recuperación del bosque nativo para 2035, lo que significaría una captura de emisiones de aproximadamente 200 millones de toneladas de CO2”
• “Me es grato anunciar que este año ingresarán más de 1000 mega wats de energías renovables no convencionales a nuestra matriz energética”

Nicolás Maduro
Presidente de Venezuela

• “Si ayer era tarde para combatir con efectividad al cambio climático, pronto será demasiado tarde”.
• El fenómeno tiene consecuencias cada vez más devastadoras que amenazan con la destrucción global de la vida en el planeta.
• La crisis ambiental de origen humano es resultado de la crisis de un modelo de civilización capitalista basado en patrones de producción y consumo insostenibles, que generan inequidad, injusticia, pobreza y destrucción del planeta.
• “Hoy en día el 20% de los países más ricos consumen el 84% de la energía del mundo, contaminando el planeta y destruyendo su equilibrio”.
• En la actualidad el 70% de la energía que se genera en Venezuela es hidroeléctrica y hay más de 220 áreas protegidas que preservan 58 millones de hectáreas de bosques.

Evo Morales
Presidente de Bolivia en representación del Grupo de los 77.

• “Hacemos un llamado a los países desarrollados a que asuman el liderazgo en la respuesta al cambio climático, que no solo amenaza las perspectivas de avances de los países en desarrollo y su logro del desarrollo sostenible, sino también la propia existencia y la sobrevivencia de los países, las sociedades y los ecosistemas de la Madre Tierra”.
• El cambio climático es uno de los desafíos más graves de nuestro tiempo y los países en desarrollo, a pesar de ser los menos responsables de su ocurrencia, son los que más sufren sus efectos adversos.
• La Convención Marco de la ONU sobre el Cambio Climático es el foro internacional primordial de negociación para la respuesta mundial al cambio climático y se deben respetar sus principios de equidad y responsabilidades comunes pero diferenciadas.

Bruno Rodríguez
Ministro de Exteriores de Cuba

• Combatir el cambio climático es una tarea de todos y requiere la voluntad política real de los países desarrollados, que disponen de mayores capacidades.
• “La causa esencial de la crisis ambiental global, incluido el cambio climático, continúa siendo la irracionalidad e insostenibilidad de los patrones de producción y consumo que sustentan un sistema de dominación económica capitalista generador de mayor desigualdad y pobreza.”
• “Las 85 personas más acaudaladas del planeta poseen el equivalente a los recursos económicos de los 3.570 millones de habitantes más pobres.”

Juan Carlos Varela
Presidente de Panamá

• El cambio climático es un fenómeno que no distingue entre países desarrollados o los que están en vías de desarrollo y sus efectos devastadores ponen a prueba la capacidad de la comunidad internacional de sumar esfuerzos para afrontarlo.
• Panamá está ubicado en una región muy vulnerable al cambio climático y a fenómenos como El Niño y la Niña. Como consecuencia, cada año los efectos del clima dejan centenares de personas damnificadas y producen numerosos pérdidas económicas.
• “Estamos elaborando un plan energético nacional, que establecerá nuestras políticas con visión de Estado para las próximas décadas y definirá la contribución del sector energético nacional de cara a la mitigación del cambio climático, de cara a la 21 conferencia de las partes en París en el 2015”.
• Panamá está invirtiendo más de 5.000 millones de dólares en la ampliación del canal de Panamá, lo que contribuirá a reducir las emisiones del sector marítimo después de la culminación de las obras en 2016.
• En la reunión de Lima, en diciembre, Panamá presentará la candidatura para la reunión sobre el clima prevista para 2018.

De una lista de 76 candidatos, el Equipo de Soporte del Secretario General sobre Cambio Climático (CCST) seleccionó a 4 expositores de sociedad civil y a 34 participantes para la Cumbre del Clima. Entre ellos, Sandra Guzmán, Coordinadora General de GFLAC y Osver Polo Carrasco, miembro de la Red Latinoamericana Construyendo Puentes, el Grupo Perú COP20 y del MOCICC, nos comparten su balance general sobre la Cumbre.

La conferencia climática celebrada el pasado 23 de septiembre en la Ciudad de Nueva York, fue sin duda una de los encuentros más importantes para la agenda climática. El llamado realizado por el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, tenía como objetivo convocar a jefes de estado y líderes del sector privado y de sociedad civil, para llamar al liderazgo de los países en la definición de compromisos ambiciosos para la preparación del acuerdo a firmarse en 2015.

Si bien algunos países, como Bolivia en representación del G77, aludió a que el escenario en el que se deben discutir estos temas es el de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, este Cumbre fue la antesala de lo que será la COP20 a celebrarse en Lima y de la que se esperan al menos 3 cosas: integrar elementos clave para el texto de negociación del Acuerdo de París, reunir el mayor número de anuncios sobre las contribuciones nacionales que los países intentan establecer y propiciar la capitalización del Fondo Verde del Clima.

En este sentido, y tomando en cuenta los objetivos que la Cumbre Climática tenía, se puede señalar que hubo aspectos positivos, negativos y algunos temas pendientes que tendrán que ser abordados en subsecuentes reuniones.

Lo positivo

Tres aspectos positivos a resaltar de la Cumbre son:

1. Presencia de Jefes de Estado: La presencia de más de 120 jefes de Estado cuya asistencia elevó el nivel de discusión brindando al tema de cambio climático un espacio relevante en la agenda de política internacional, que depende en buena medida de los compromisos nacionales. Esto a su vez ayuda a crear un constante cambio en la retórica de los Estados. Buena parte de las intervenciones provenientes de los Jefes de Estado mostraron un mayor reconocimiento de que si bien los países desarrollados son históricamente responsables del problema, lo que el Presidente Obama reconoció en su intervención, los países en desarrollo también tienen que asumir un rol en miras a la transición hacia un desarrollo bajo en carbono. Incluso anuncios como el del desarrollo en materia de energía renovable en países como China, brindan un sentimiento de que el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas puede ayudar al alcance del acuerdo global.
2. Anuncios de reducción de emisiones y  financieros: El anuncio de algunos países por parte de actores como el Alcalde de Nueva York de que en 2050 reducirán 80% de sus emisiones, fueron cifras alentadoras. Por otra parte, la Cumbre del Clima también sirvió como escenario para que países manifestaran compromisos financieros para enfrentar el cambio climático, incluyendo la capitalización del Fondo Verde. Entre los anuncios en materia de financiamiento se encuentran mil millones de dólares de Francia (por los siguientes tres años); cien millones de Corea del Sur; setenta millones de Dinamarca; treinta y tres millones de Noruega; cien millones de Suiza; seis punto ocho millones de Luxemburgo; seis mil millones de Japón (por los próximos 3 años) e incluso  diez millones de México.
3. Diálogo político motor de la movilización social: El diálogo político convocado por Ban Ki Moon, fue el pretexto perfecto para que la población se uniera y manifestara su inconformidad ante la escasa acción de los países. La movilización de más de 400,000 personas en Nueva York y de otras 200,000 en otros países del mundo, a través de 2,600 eventos ocurridos en 162 países, fueron un resultado positivo que no quedo sólo en las calles, sino que permeó a las discusiones “oficiales”, en las que Jefes de Gobierno como Obama reconocieron que “no podemos pretender que no escuchamos”.

Estos elementos positivos permiten ver que el camino es todavía largo, pero que aún existen esperanzas de que un Acuerdo Global se integre para dar atención urgente al problema. No obstante lo anterior, lo reacción no está siendo suficientemente rápida y de ahí se derivan los aspectos negativos de este encuentro.

Tres aspectos negativos a resaltar son:

1. Sin cifras para alcanzar la estabilización de emisiones: Los anuncios planteados por los países no incluyeron metas ambiciosas de reducción de emisiones que permitan cerrar la brecha entre lo que se tiene que reducir en términos de emisiones y lo que actualmente se reduce, es decir, seguimos en el escenario planteado por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, que afirma que de seguir con la tendencia actual, podremos alcanzar un aumento de temperatura de 4 y hasta 6 grados centígrados, situación que pondrá en peligro a muchas especies, incluyendo la humana.
2. Sin dinero suficiente: Las cifras y anuncios en materia de financiamiento tampoco son suficientes para arrancar la capitalización del Fondo y tampoco para combatir el problema partiendo de que se requiere al menos del 2% del PIB mundial, según lo ha estimado el Estudio de la Economía del Cambio Climático.
3. Sin presencia y compromisos homogéneos: La falta de compromiso e incluso de presencia de Jefes de Estado como Stephen Harper de Canadá, también anuncia un vacío en el debate, pues es evidente que muchos países seguirán con sus posiciones históricas, lo que complejiza el escenario hacia un Acuerdo Global.

Lo negativo es parte de la historia que ya conocemos y esto sigue determinando el proceso internacional. Pero no está todo perdido. Resta atender los asuntos pendientes que tendremos en los próximos años.

Lo pendiente

1. Contribuciones Nacionalmente Determinadas: La Cumbre del Clima fue la antesala de la COP20, organizada para evitar lo ocurrido en Copenhague y abrir el espacio para que todas las partes, de manera conjunta, arrojaran las piezas que necesita el Acuerdo Global. En este sentido, el proceso de la definición de las contribuciones nacionalmente determinadas (INDCs por sus siglas en inglés) serán el escenario idóneo para que los países logren las condiciones para elaborar, firmar, ratificar e implementar dicho  Acuerdo. Las contribuciones que tendrán que ser presentadas antes de marzo de 2015 son una oportunidad para que diversos actores trabajen de manera conjunta a nivel nacional.
2. Elementos básicos del Acuerdo Global: La COP20 debe ser el escenario en el que se integren los elementos básicos del acuerdo a firmarse en 2015 lo que dependerá de la preparación de un escenario adecuado y propicio. Este escenario tiene como reto mayúsculo la incorporación de elementos en los pilare estratégicos comenzando con el tema de financiamiento, para cuya atención se espera la capitalización del Fondo Verde como elemento mínimo de voluntad política, seguido de metas de mitigación que logren la estabilización de emisiones y  metas de adaptación para atender los impactos ya sufridos y los que están por ocurrir.
3. Capitalización y transparencia para el financiamiento: La capitalización del Fondo será un punto, pero no el único, pues dependerá de la inclusión de mecanismos adecuados de medición, reporte y verificación y de la transversalización de mecanismos de transparencia para garantizar que el financiamiento fluya y sea utilizado de manera efectiva y para los fines que fueron establecidos.

La Cumbre del Clima fue un momento clave para preparar el escenario hacia 2015, sus resultados sin embargo, no dan respuesta a la demanda de los miles de habitantes que salieron a las calles a marchar, pero su celebración también muestra los retos que existen frente a nosotros. Ban Ki Moon  señaló que no hay tiempo que perder y que “no podemos esperar hasta mañana”, por lo que es necesario atender los pendientes, particularmente aquellos derivados de las estructuras nacionales en donde como ciudadanía, tenemos una enorme responsabilidad.

La Cumbre del Clima, realizada en NY el 23 de septiembre,  ha demostrado que los líderes aún están muy lejos de avanzar con los compromisos que permitan limitar la temperatura del planeta y se pueda asegurar la firma del Acuerdo Climático en París en la COP21-Francia.
Pero han salido una serie de iniciativas y contribuciones por parte de algunos gobiernos, empresas privadas, bancos, alcaldes y la cooperación internacional para actuar y enfrentar el cambio climático en el aspecto de reducción de emisiones, mayores aportes al financiamiento climático  y la reducción a la deforestación en los bosques.
Después de NY los líderes tendrán que reforzar sus compromisos nacionales  y mostrar en la COP20, Lima, Perú en  diciembre de este año,  algunas luces que permitan asegurar el texto borrador del Acuerdo camino a París, Francia 2015.
Para ello se espera que los países lleguen a Lima con sus contribuciones nacionales, y con la adhesión a los compromisos derivados de Doha (COP18) para lograr la extensión del protocolo Kyoto más allá del 2020, (que hasta el momento ha sido firmado por 20 países), que incrementen el  financiamiento climático y que aumenten la ambición más allá del 2020.
En NY más de 600 mil personas han expresado en las calles y en otras ciudades en el marco de la movilización climática de los pueblos a sus líderes, menos palabras y más acción. Las y los ciudadanos esperan respuestas políticas con firmeza en la COP20 de los gobiernos y así poder asegurar el bienestar del planeta y las generaciones futuras.